Contadores instantáneos de electricidad: los chivatos del despilfarro

Hoy en día encontramos en el mercado diferentes modelos de Contadores Instantáneos de Electricidad, CIEs, unos aparatos muy útiles para facilitar el ahorro energético en nuestras viviendas. Su precio aproximado de 50-70 € dependiendo del modelo y las aplicaciones y miden hasta 20 kW de potencia instantánea (en el caso del modelo Efergy).

Los Contadores Instantáneos de Electricidad nos permiten ver, en tiempo real, cuánta energía eléctrica consumimos. Además de los kW consumidos en cada instante, podemos ver el coste en € y, además, permite visualizar las emisiones de CO2 asociadas a ese consumo.

 

A partir de un monitor inalámbrico o incluso por internet, dependiendo del modelo, el contador instantáneo de electricidad actúa como un reloj, pero en vez de marcar las horas, marca tu consumo eléctrico, al instante y sin cables. 

 

Su instalación y funcionamiento es muy sencillo: tiene un sensor (pinza amperimétrica) que debemos instalar en el cuadro eléctrico, y que va conectado a un transmisor que envía los datos del consumo eléctrico a nuestro monitor o cuenta en internet, donde podemos visualizar la potencia eléctrica consumida en todo momento.

Los datos de consumo eléctrico se van almacenando y, a partir de un programa de tratamiento de estos datos, podemos consultar el consumo horario, diario, semanal y mensual de forma gráfica. También tenemos otras opciones como comparar tarifas alternativas o comparar nuestro consumo en redes sociales.

 

¿Para qué sirven los contadores instantáneos de electricidad?

 

a) Para conocer el consumo eléctrico en tiempo real

El poder visualizar en tiempo real la potencia eléctrica que estamos consumiendo a partir de un monitor, es el primer paso para ser conscientes del flujo de energía que estamos utilizando en nuestra vivienda y poder hacer algo al respecto. Si nuestro monitor marca un consumo elevado cuando nos vamos a dormir o cuando salimos de casa, nos puede estar avisando de que nos hemos dejado algo encendido. O nos ayuda a conocer qué equipos eléctricos tienen una mayor potencia en nuestra vivienda, ¿el horno, el microondas, la plancha, la tostadora…?, facilitando un uso racional de estos. Es una buena herramienta para no pasar por alto nuestro consumo eléctrico, del que solo tenemos información al final de mes, cuando pagamos la factura eléctrica. 

b) Para descubrir los puntos negros del consumo eléctrico de la vivienda

Los Contadores Instantáneos de Electricidad nos ayudan a descubrir aquellos puntos en los que estamos haciendo un consumo ineficiente o innecesario. Por ejemplo con los CIEs hemos descubierto que ciertos aparatos eléctricos de nuestras viviendas, aun estando apagados y sin disponer de ningún piloto rojo que indique que están en modo espera (stand-by), siguen consumiendo una cantidad de energía considerable. Algunos ejemplos de estos “consumos fantasmas o consumos vampiros”, descubiertos en diferentes casas que están participando en proyectos educativos realizados en Zaragoza, son los siguientes:

Consumos fantasma” de algunos aparatos que NO tienen piloto rojo y estando apagados, siguen consumiendo:

• Aire Acondicionado: hasta 180 w
• Lavavajillas: hasta 40 w
• Lavadora: hasta 20w
• Ordenador de torre+impresora+router: hasta 31w
• Transformadores focos halógenos: hasta 40 w

Otro de los aspectos que podemos analizar con el CIE es el nivel de eficiencia de nuestro sistema de iluminación. El CIE nos permite valorar si la potencia de nuestras bombillas es muy elevada respecto a la cantidad de iluminación que necesitamos en cada espacio. En los estudios de viviendas que estamos realizando en Zaragoza estamos registrando un elevado número de focos halógenos, en pasillos, salones, cocinas y baños con un consumo eléctrico asociado excesivo. Hemos encontrado desde 10, 20 y hasta más de 30 halógenos en la misma vivienda. Lo que significa un consumo muy elevado en iluminación, ya que estas lámparas suelen tener un consumo que puede variar de los 35w a los 150w. En estos casos conviene comprobar qué bombillas podemos ir sustituyendo o dejando de utilizar.

Por ejemplo a la hora de estudiar o utilizar el ordenador, podemos escoger una luz focalizada y no iluminar toda la habitación, consiguiendo un ahorro de consumo importante (51 w en el caso ilustrado en la imagen inferior).

 

En definitiva, los Contadores Instantáneos de Electricidad promueven la cultura de la medida y nos permiten reaccionar ante consumos innecesarios, además de evaluar las medidas de ahorro más eficaces. En el próximo post, mostraremos algunos ejemplos...

(continuará)
 

Julia Mérida Conde, Educadora Ambiental, Grupo de Energía y Edificación Universidad de Zaragoza y Asociación Barnamil

Nota del editor: La mayoría de los contadores instantáneos de electricidad que se comercializan en España para uso no profesional no discrimina entre la energía activa (la que realmente consumimos y nos factura nuestra compañía eléctrica) y energía reactiva, de forma que el medidor presenta ambas agregadas. Por este motivo, algunas mediciones realizadas con estos aparatos (como por ejemplo las relativas al consumo fantasma de las placas vitrocerámicas) pueden estar sobrestimadas. Los medidores de electricidad enchufables sí discriminan habitualmente (cuando indican el consumo no contabilizan la energía reactiva), por lo que son más fiables para el caso de electrodomésticos que generen este tipo de energía.