Cada vez que se acciona la cisterna, se pueden enviar a la alcantarilla unos 10 litros de agua previamente tratados para su potabilización.

Existen algunas formas de ahorrar este gasto, generalmente excesivo, de agua en el hogar. Para las cisternas que están detrás del WC, un regulador de cisterna, fácil de instalar y que cuesta menos de 6 euros, permite regular la cantidad de agua que se desea evacuar, pudiendo interrumpir su fluido. Para las cisternas WC elevadas, la introducción de un ladrillo, una piedra grande, una botella o frasco lleno de agua posibilita también la reducción del volumen de agua liberado, siendo, además, mucho más rápido el llenado del depósito.

En caso de que hagamos obras, podemos instalar cisternas de doble capacidad, que permiten el ahorro de gran cantidad de agua. Estas cisternas tienen instalado un sistema con el que evacuar toda o la mitad de la carga que contiene, en función de las necesidades, reduciendo el volumen de agua utilizado de 6 a 3 litros.

Otros permiten la interrupción de la descarga al soltarlos con lo que podemos regular la descarga a voluntad. Y por último, en algunos dispositivos de descarga total puede realizarse una sencilla operación y convertirlo en un tirador de descarga controlada por menos de un euro.

Busca tu mejor opción, seguro que con poco esfuerzo conseguirás un gran ahorro.

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